El trabajo que hicimos en este dormitorio consitía en darle un nuevo aire respetando el estilo clásico de la propietaria. Cambiamos parte del mobiliario para conseguir un ambiente  acogedor, como el cabecero, la mesa de noche y los estantes de obra. Decidimos que se pintara todo de blanco  y se le dio protagonismo a la pared del cabecero pintándola de color topo. Se acabó la renovación dándole un toque de color en los complementos.

                                               Antes

                                              Después

imágenes: 2×2